A las personas Aries les encanta recibir elogios, pero estos deben ser sinceros. No les gustan los halagos exagerados o demasiado melosos. Prefieren que se reconozcan sus cualidades de manera genuina, sin adornos innecesarios. El equilibrio en los elogios es fundamental; un comentario honesto y bien intencionado será mucho más efectivo que un exceso de cumplidos que parezcan poco auténticos. La sinceridad siempre será lo que más valore en sus relaciones.
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